El blanqueamiento dental es uno de los tratamientos estéticos más solicitados en las clínicas odontológicas. Sin embargo, entre recomendaciones caseras y consejos de internet, circulan muchos mitos que pueden llevar a confusiones e incluso poner en riesgo tu salud bucal.

Mitos y verdades

Mito 1: El blanqueamiento daña el esmalte dental.

✅ Verdad: Si el procedimiento es realizado por un profesional con productos aprobados, no daña el esmalte. El problema surge cuando se usan químicos sin control o métodos caseros abrasivos.

Mito 2: El blanqueamiento es para toda la vida.

✅ Verdad parcial: Los resultados pueden durar varios años, pero no son permanentes. Factores como el consumo de café, té, vino tinto o tabaco pueden acelerar el oscurecimiento de los dientes.

Mito 3: El bicarbonato y el limón son blanqueadores seguros.

🚫 Falso: Aunque aclaran temporalmente el tono, desgastan el esmalte y aumentan la sensibilidad dental, provocando daño irreversible.

Mito 4: Se puede blanquear cualquier diente.

🚫 Falso: El blanqueamiento no cambia el color de coronas, carillas o empastes, por lo que es importante evaluar cada caso antes de iniciar el tratamiento.